Artistas visibilizaron, exitosamente, diferentes posibilidades de recuperar el textil durante Feria Calle, el pasado 22 y 23 de enero.
Arte Educativo y Sustentable
“Feria Calle es una propuesta educativa. Más que un mercado, se trata de educar a través de talleres, charlas, ciclos de cine, exhibición y eventos extracurriculares”, explicó la artista Daniela Fabrizi, coordinadora del evento.
La artista puertorriqueña, se interesó en la recuperación de textiles tras toparse con las infinitas posibilidades que podría tener en su carrera como diseñadora de vestuarios y a la vez crear un impacto positivo. “Tanto desperdicio de materiales y la gente donando, transformó mi trabajo del vestuario al arte textil y a construir con material reciclado, aprender a tejer, bordar, transformar ropa y luego me inspiró a formar Feria Calle”, explicó.

Esta cuarta edición de la actividad contó con la participación de más de 60 artistas y exhibidores con un total de 6 talleres.
Uno de ellos, por ejemplo, se trató sobre la confección de joyería con plástico número seis, tipo que no es reciclable a nivel gubernamental en Puerto Rico. De esta manera, sirvió para desarrollar habilidades y educar sobre qué productos son adecuados para reciclar y cuáles no. Entre los demás, se incluyó un taller de guirnaldas sustentables, de parches y pines bordados, collage, y uno sobre la confección de ropa de pasarela con material reciclado.
Economía Circular
En Puerto Rico se desechan sobre 400 toneladas de ropa al año, según un estudio por Liechten Sarramia en el 2020. Es por esta razón que Feria Calle promueve proyectos que implementen metodologías para rescatar textiles y promover la economía circular en la industria de la moda.

Un claro ejemplo es Porta Company, un negocio que se dedica a confeccionar artículos con textiles reusados, particularmente, de muestras de tela que rescatan de empresas que ya no las necesitan. Migdalia Rivera comenzó el negocio junto a su hija Mónica Pérez, quien a raíz de su experiencia en la industria de arquitectura y el diseño, reconoció el impacto positivo que podría tener el reuso creativo. Entre los artículos confeccionan bolsos, carteras, cover para computadoras, mascarillas, porta utensilios y más. Cada pieza es única, hecha a mano e incluso pueden ser resistentes al agua.

“El hecho de reciclar y recuperar ropa de segunda mano te lleva a un proceso más lento de consumo…de ahí a trabajar la ropa que tienes y a donarla también, hace que se consuma menos porque nos adentramos en lo que es la economía circular y nos nutrimos de lo que ya tenemos”, comentó Fabrizi.
También, resaltó la importancia de reparar artículos de ropa que son salvables, versus ir a comprar uno nuevo. “Hay movimiento de costura en la isla, pero definitivamente se ha perdido generacionalmente. Sin embargo, está reviviendo y no necesariamente lo vemos. Así que, en Feria Calle tengo bordadoras, tejedoras, damos talleres de macramé y crochet para reactivar el quehacer” , añadió durante el evento.
Por otro lado, la actividad también se relaciona con otros proyectos que reducen el impacto ambiental, y fomentan la economía circular, el cooperativismo y el trueque.

El grupo de Tais estuvo presente con sus Borikashi Kits, un servicio para reciclar residuos orgánicos en el hogar. El Borikashi es un aditivo producido por la industria, que permite un proceso de compostaje a base de la fermentación. Además, se encargaron de recoger los envases de comida compostables en el evento para posteriormente llevarlos a sus facilidades de composta.

“La idea es que te vayas sabiendo que estos servicios existen. El propósito es que además de apoyar a los artistas locales, te vayas con el conocimiento de que puedes trabajar en el impacto ambiental de tu rutina diaria”, concluyó.
Feria Calle culminará con su última actividad La Trash Ball junto a La Bori Vogue el próximo domingo 30 de enero en Kweens Club en Santurce.