El espacio de arte para la danza japonesa gana el Frame Awards 2020 – Escenografía del año.
Durante mucho tiempo, los japoneses han estado acumulando colores desde tiempos antiguos para expresar cosas sagradas. Además, apilar papel con siluetas cuadradas se ha utilizado como algo que representa la profundidad sagrada. El diseñador Kazunobu Nakamura creó un espacio que transforma la atmósfera al cambiar de varios colores con los cuadrados “amontonándose” como motivo.

Los paneles que vuelan en el aire enfocan al bailarín mientras cubren el espacio sobre el escenario.

Estos también representan la apariencia de la luz que pasa por el espacio que no podría verse ver sin ellos.

Están fabricados de una malla de hilos transparentes ultrafinos hechos de una resina de doble capa, lo que permite que reciban una cantidad moderada de luz, apareciendo y desapareciendo.

Los paneles se superponen intrincadamente.


Este espacio se centra en la danza japonesa.