Entras a un salón lleno de gente. De momento, ves unos ojos que te miran. Mantienen contacto visual por un segundo que parece una eternidad. Una conexión inexplicable se ha formado y sólo quieres acercarte. La Hug Chair de Gabriella Asztalos crea ese espacio íntimo para dos en donde se puede hacer desaparecer el entorno y sólo enfocarse en el otro. A cada lado puede sentarse una persona de frente a la otra en un pequeño nido de privacidad con su forma circular y cualidad acústica. Este no es solo un mueble para sentarse, es una pieza de arte que define un espacio.
Disponible sólo por encargo, el mueble está disponible en tres terminaciones: laca blanca o negra sobre fibra de vidrio o en madera de nogal, tapizado en piel genuina del color que el cliente escoja. La base es giratoria de acero inoxidable.
Natural de Budapest, Hungría, Asztalos era bailarina profesional de ballet clásico antes de convertirse en diseñadora. Su capacidad de expresar emociones en lenguaje corporal es evidente en su diseño de la Hug Chair. El abrazo de este asiento asemeja la posición de los brazos de una ballerina. La Hug Chair es muy especial para Asztalos, puesto que la posicionó en el mapa del diseño al ganar el Premio al Diseño en el ICFF de Nueva York y el Premio al Diseño de Muebles Internacional en el IFFS de Singapur. Asztalos fundó su estudio de diseño en Barcelona en 2010.
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