Di Welle: una ola de diseño multidisciplinario

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El nuevo diseño para los espacios exteriores del complejo de oficinas di welle (La Ola) en Frankfurt, Alemania es una obra de arte, arquitectura, arquitectura paisajista y urbanismo.

La nueva escultura en el complejo de oficinas die welle en Frankfurt invita al transeúnte a entrar a sus instalaciones e integra el proyecto dentro del tejido urbano.

Foto: schneider+schumacher

El proyecto requería rediseñar las áreas verdes del complejo, localizado en las cercanías del Alte Oper en Frankfurt am Main. Fue el nombre del complejo lo que encendió la chispa de creatividad y la idea inicial para el diseño de schneider+schumacher. Los arquitectos decidieron llevar el concepto más allá y explorarlo con profundidad: en la forma de una ola tridimensional que no solo define el espacio y llama la atención, sino que crea un espacio acogedor en donde la gente quisiera estar, revitalizando así el área. «Cuando vemos algo sobre el cual podemos proyectar nuestras propias imágenes, experiencias y memorias, este puede conjurar asociaciones y emociones. Despierta nuestro interés», explica el profesor Michael Schumacher, quien junto con Till Schneider, lidera la práctica arquitectónica schneider+schumacher.

Foto: schneider+schumacher

La escultura de aluminio consiste de seis elementos que fluyen como una ola a lo largo del espacio entre los edificios principales. Tres de estos elementos se alzan del suelo como arcos de distintas alturas. Legando del Opernplatz, aparece un arco de siete metros de altura seguido por otro arco de 18 metros de altura que se tuerce para formar un área semicircular. Unos metros más adelante, la escultura crea otros arcos como si saltara del suelo.

Foto: schneider+schumacher

La superficie de asfalto de color claro aparenta ser líquida siguiendo su curso natural y enfatizando el concepto de la ola. Con el mismo concepto, schneider+schumacher creó cuatro bancos. Cada uno está hecho de una sola pieza de madera que puede doblarse como una ola.

Foto: schneider+schumacher

Durante el proceso de diseño, hubo que seguir ciertas directrices geométricas para permitir que la forma de los arcos y los bordes fueran fabricados. Esto significó emplear un sistema paramétrico para transformar el boceto inicial sobre papel en una forma geométrica y así fuera más sencillo implementarlo en la práctica. Usando un programa de computadoras, este diseño paramétrico permitió que los elementos de construcción fueran optimizados y luego probados para verificar cómo afectaban al sistema en su totalidad. El resultado fue un plano de construcción detallado que formó la base para el proceso de manufactura.

Foto: schneider+schumacher

La escultura finalizada consta de dos kilómetros de juntas soldadas que en su totalidad pesan 100 toneladas. Un proceso especial se desarrolló para que las juntas se soldaran por un lado solamente sin causar distorsiones.

Foto: schneider+schumacher

Este rediseño es otro ejemplo de la «poesía pragmática» de la filosofía de diseño de schneider+schumacher que medra en la claridad de construcción, una solución seria al plan arquitectónico y el deleite de la atención al detalle.

www.schneider-schumacher.com

Foto: schneider+schumacher
Foto: schneider+schumacher
Foto: schneider+schumacher
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