La exhibición Procesos de Patrick Urbain inaugura hoy en la Galería Hidrante.
Patrick Urbain, arquitecto y artista plástico, lleva más de 20 años viviendo en Puerto Rico. Natural de Bélgica, se trasladó recientemente de Ponce a San Juan. 90 GRADOSº visitó su casa-estudio en Santurce para conversar sobre su más reciente colección, Procesos.
¿Cómo surge la idea de Procesos?
El título y el contenido de la exposición surge de una preocupación a raíz de conversaciones con varios artistas sobre el arte contemporáneo: esos movimientos que quieren volver a un arte más figurativo, más técnico, y la percepción de que el arte contemporáneo es un refugio para artistas mediocres. A mí me encanta el arte contemporáneo, el arte moderno del siglo XX. Se dice que el arte habla por sí mismo, pero yo no estoy totalmente de acuerdo. El arte tiene la capacidad de emocionar pero las obras que más tocan a la gente son las que tienen un contexto. Yo creo que los artistas en este último siglo han desarrollado un nuevo lenguaje, un nuevo vocabulario, pero nos hemos olvidado de proveer un diccionario.
Entonces, ¿a quién está dirigida la exposición?
Está dirigida, precisamente, a todo el mundo, especialmente a la gente que se cree que no sabe de arte, que tal vez tiene la sensibilidad para apreciarla pero necesitan una guía. La idea es establecer un puente entre artista y público.
¿Dirías tú que la muestra tiene un aspecto educativo?
Hay algo de eso. Hay obras que tienen interés como piezas individuales, pero que dentro del proceso tomaron otra dimensión porque uno puede ver cómo una cosa se convierte en la otra. Yo creo que es importante que el público pueda conocer el proceso creativo de los artistas. Mucha gente se ha interesado más, sobre todo la juventud en los años 90 en el cine porque habían muchos “Making of”.
Sí…
¿Verdad? Después de la película presentaban el “Making of” y a veces eso era más interesante que la película misma. En ese sentido, Procesos es un “Making of” de la descomposición de un objeto.
Lo nuevo sería no perderse en la traducción…
Sí, sí… Entonces el espacio para ensanchar el arte es más reducido. Cada vez es más raro ver una obra y decir “Yo nunca había visto algo así antes”. Desde el siglo XX todo lo que se producía era algo nuevo. Ahora no. Es un proceso de empezar a recoger las experiencias y armarlas nuevamente a partir de nuestras experiencias culturales y personales para hacerlo. Entonces, no se trata de innovar sino de abrir un espacio para contar tus experiencias personales. Propicia mucho más el dialogo, creo yo.
¿Dónde te ubicas tú en ese contexto?
En el caso de Procesos en particular, me localizo como a principio del siglo XX, en la época en que Kandinsky y Delaunay pensaban que lo que le daba valor a una obra no era el objeto representado, que podía haber una pintura mediocre de una mujer hermosa y una pintura fabulosa de una fábrica en ruinas. Entonces, si el objeto no es tan importante, ¿por qué no vamos mas allá del objeto? Ese es el principio de la abstracción.
¿Ubicas la desconexión del arte con el espectador en esa época?
Sí porque la idea era liberarse del objeto pero enseñan una obra abstracta y la gente no sabe lo que representa y empiezan a descomponer objetos en su cabeza que no existen. Por lo tanto, no nos hemos liberado de nada porque, creo yo, no tenían esa conexión con ese proceso de abstracción. La idea de enseñar ese proceso es que no sólo podamos apreciar el resultado, sino el experimento en su totalidad.
Reconectar al público…
Yo quisiera eso, comenzar a crear puentes, que la gente entienda que el arte contemporáneo, que el arte moderno no es un fraude, que hay artistas que lo trabajan en serio, que trabajan con su alma, que trabajan con un vocabulario nuevo aunque no quisiéramos, que ese vocabulario termina desapareciendo, ¿no? Volver a pintar las cosas como nosotros creemos que son… no tiene sentido volver atrás, creo yo.
Veo que usaste acrílico y pastel sobre lienzos en gran tamaño. ¿Cómo el medio te ayuda a expresar tus procesos?
Al principio, los dibujos en pastel eran bosquejos para pinturas mas ambiciosas. Son 16 dibujos partiendo del flamboyán como objeto. Esto no es casual. El flamboyán es quizás el objeto que más se ha pintado y vendido en Puerto Rico. De esos 16 dibujos empecé a sacar una primera pintura, pero no aportada nada nuevo que no estaba ya en los dibujos. Por lo tanto, los dibujos son las obras como tal. Es una abstracción de qué es lo que más nos gusta del flamboyán.
Lo otro es un tema sobre la sexualidad. Résille en francés es como un encaje, que revela y oculta la desnudez a la misma vez, en forma de hilos que se ponen las mujeres que bailan striptease. Es el dilema que los artistas tenemos entre el objeto y la pintura cuando es de contenido erótico. ¿Qué es lo que admiramos, es la mujer que está pintada o la pintura como tal? El encaje aumenta aún más ese conflicto porque tiene unas cualidades plásticas extraordinarias, pero a la misma vez no se creó para hacer obras de arte, sino para resaltar la sexualidad. Es difícil concentrarse si quieres mirar la desnudez del cuerpo — el encaje molesta — y si quieres ver la cualidad plástica del encaje, lo atractivo, la sexualidad molesta también. Es una descomposición de la sexualidad.
Sí, tienes que concentrarte para descomponer en la mente para saber luego qué descomponer en el papel… ya lo estas viendo con otros ojos.
Sí, llegas al punto en que ya no puedes identificar si es un cuerpo humano, a menos que utilices ciertas claves de referencia con la pintura figurativa original. En Resillé, el proceso de abstracción comienza muy temprano porque la gente piensa que son nalgas y en realidad son rodillas. Es la capacidad que tiene la mente humana para recrear objetos que no existen. En eso también está la magia del proceso de abstracción.
Sí, estas poniendo al espectador en la posición del artista y ahí le da un poco de humor. La naturaleza trata de…
De reconstruir lo que no entiende.
Procesos inaugura hoy viernes, 1 de julio a las 7:00 pm en la Galería Hidrante, Calle Saldaña #454 en Santurce, San Juan, PuertoRico.
www.hidranteee.com
www.facebook.com/patrick.urbain

Rebelión.
Serie “Résille” (Versión Semifigurativa). Acrílico sobre lienzo.
40″ x 54″

Serie “Résille” (Versión Semiabstracta). Acrílico sobre lienzo.
40″ x 54″

Liberación.
Serie “Résille” (Versión Abstracta).
Acrílico sobre lienzo.
40″ x 54″