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TIRPITZ, el «Museo Escondido» en la costa oeste de Dinamarca cuenta historias de la Segunda Guerra Mundial

Varde Museums, BIG-Bjarke Ingels Group y Tinker Imagineers celebran la apertura de TIRPITZ — un santuario en la arena que actúa como un gentil contrapeso a la dramática historia de guerra de este lugar en Blåvand en la costa oeste de Dinamarca.

Foto: Mike Bink Photography

El nuevo TIRPITZ transforma y expande un búnker histórico alemán de la Segunda Guerra Mundial en un innovador complejo cultural que comprende cuatro exhibiciones dentro de una estructura, perfectamente incrustado en los territorios protegidos de Blåvand. Se espera que el «museo invisible» de 2,800 metros cuadrados atraiga unos 100,000 visitantes al año.

Foto: Mike Bink Photography

Como antítesis al volumen pesado del búnker de la Segunda Guerra Mundial, el museo aparece sutilmente como la intersección entre una serie de cortes precisos en el paisaje.

Foto: Rasmus Bendix

Contrario a la construcción intensiva y pesada del regelbau de la fortaleza de artillería original — diseñada como un inmenso bloque de concreto — el nuevo TRIPITZ  corta finamente en la duna y se camuflajea con el paisaje. 

Al llegar, lo primero que ven los visitantes es el búnker y, mientras se acercan, ven los cortes finos y caminos que conducen al centro del complejo del museo. El patio central da acceso a las cuatro galerías bajo tierra con mucha luz natural.

Foto: Colin John Seymour

Las exhibiciones, diseñadas por la agencia danesa Tinker Imagineers muestra experiencias temáticas permanentes y temporeras.

Foto: Rasmus Hjortshoj
Foto: Colin John Seymour

Cada galería tiene su propio ritmo, sonando sincronizadamente con su historia: alto y bajo, noche y día, bueno y malo, caliente y frío, el paso del tiempo.

Foto: Mike Bink Photography

Ejército de Hormigón cuenta las historias humanas en la sombra del enorme proyecto de defensa de Hitler, el Muro Atlántico, como la historia de Ana que tuvo un hijo con un soldado alemán.

Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography

Oro de la Costa Oeste es la exhibición más amplia de ámbar de Europa Occidental, presentada en un bosque de acero encantador.

Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography

Junto con sus cambiantes colores y sonidos, la atmósfera de los salones se alternan entre frío y caliente: referencias a la historia del ámbar.

Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography

Historias de la Costa Oeste cuenta 100,000 años de historia de la costa oeste y se convierte en un teatro 4D nocturno dos veces cada hora.

Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography

El teatro audiovisual hace que los visitantes se sienten en un bote salvavidas antes de llevarlos en un tempestuoso viaje a través del tiempo.

Foto: Mike Bink Photography

Desde las galerías hundidas, los visitantes pueden caminar al búnker histórico que cuenta la historia de una impresionante máquina de guerra.

Foto: Mike Bink Photography
Foto: Mike Bink Photography

En la oscuridad, los visitantes pueden jugar con la luz y activar juegos de sombras que revelan cómo el búnker debió haber funcionado.

Foto: Mike Bink Photography

El edificio consiste de cuatro materiales y elementos principales que también se encuentran en las estructuras existentes y el paisaje del área — concreto, acero, cristal y madera. Los muros de los salones de exhibición son de hormigón formados in situ, apoyando el paisaje y cargando las cubiertas del techo en voladizo que se extienden por 36 metros. La cubierta más grande pesa 1,090 toneladas y la ingeniería de la compleja estructura del techo fue realizada por la firma suiza Lüchinger+Meyer. Los materiales interiores principales utilizados en todas las galerías son madera y acero laminado en caliente, aplicado a todos los muros interiores.

Foto: Colin John Seymour

Paneles de cristal de seis metros de alto dan hacia el patio interior para dejar entrar la luz natural a los cuatro espacios de exhibición.

www.tirpitz.dk

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